*Irreversible el triunfo de Morena en Acapulco, señala el candidato presidencial
*“Vamos a arrasar con AMLO y Adela”, gritan los asistentes al multitudinario cierre de campaña realizado en el Zócalo de Acapulco
Acapulco, Gro. 25 de Junio del 2018. – Con al menos 60 mil personas cerró campaña la candidata de Morena y Encuentro Social, Adela Román Ocampo en el Zócalo porteño, junto a Andrés Manuel López Obrador, quien aseguró que el triunfo en Acapulco es irreversible.
Los asistentes se aglutinados en toda la plaza y en los dos carriles de la costera Miguel Alemán, comenzaron a llegar desde las ocho de la mañana para escuchar el mensaje de los candidatos de la colisión “Juntos Haremos Historia”.
Ahí, López Obrador mencionó que es importante el voto parejo para todos los candidatos, pues al llegar a la presidencia de la República, necesitará el apoyo de diputados en el Congreso federal y local, con el propósito de reformar las leyes que le han hecho daño al pueblo.
Llamó a no confiarse y este primero de julio salir a votar temprano y sin miedo para concretar la cuarta transformación de México.
Por su parte, Román Ocampo, dio la bienvenida “al próximo presidente de México” y dijo que Guerrero y Acapulco están presentes en la Cuarta Transformación del país que es inminente a partir de la victoria del movimiento de regeneración nacional el próximo primero de julio.
En estos momentos, dijo, “no debemos olvidar que la lucha se da con la participación ciudadana y que nuestra arma más poderosa es aquella por la que dio su vida el presidente Madero: el voto”.
La valla metálica por donde pasó el presidenciable, estuvo tupida de personas para poder estrechar la mano de su líder, que prometió reducir el 50 por ciento de su salario como presidente de México.
La muchedumbre aguantó el rayo del sol desde las nueve de la mañana hasta pasadas las 12 del día, con un cielo totalmente despejado con tal de escuchar la convocatoria del perseverante López Obrador.
Al finalizar el mitin, los ciudadanos se retiraron, cada uno por su parte, entre cansados y llenos de entusiasmo por presenciar la prometida cuarta transformación de México, la cual será pacífica y sin derramamiento de sangre.