*Con promesas falsas pretenden que vuelvan a Tlatempanapa acusan
Chilpancingo Gro; a 27 de enero del 2019.- Las 18 familias desplazadas de Tlaltempanapa, municipio de Zitlala, rechazaron la propuesta de la Secretaría de Gobierno de regresar a su comunidad ya que “si regresamos nos van a matar, por eso rechazamos la propuesta de las autoridades que traen un escrito de comisarios municipales y ejidales que están falsificadas” dijo Víctor Ojeda Hernández, padre de una familia desplazada que, junto con las otras 17 están refugiadas en la cabecera municipal de Copalillo, cerca del lugar de donde salieron.
Los representantes de esas familias ofrecieron una conferencia de prensa acompañados de Abogados del Centro de Derechos Humanos “José María Morelos y Pavón” de Chilapa.
Informaron que desde hace 5 años inició la violencia en esa localidad indígena de Zitlala, cuando un grupo de hombres armados se incorporó a las filas del grupo criminal Los Ardillos, quienes de manera violenta se hicieron del control de Tlaltempanapa.
Esa comunidad nahua llegó a tener mil 800 habitantes y en la actualidad es un pueblo desolado donde vive apenas una treintena de personas que forman parte de ese grupo criminal.
Esas 18 familias decidieron huir del horror y las constantes amenazas el pasado 5 de noviembre y lo hicieron luego de que ese grupo armado irrumpiera en una vivienda y se llevara por la fuerza a los señores Victoriano Hernández y a los hermanos Pedro y Javier Ojeda.
La niña María de Jesús Hernández Tecuchillo narró que los hombres armados de la banda de Los Ardillos irrumpieron en su vivienda y “levantaron” a su papá y a sus tíos: “llegaron, los maniataron, los golpearon y se los llevaron con rumbo desconocido. Desde esa fecha no sé nada de mi padre y lo que exigimos es justicia. Las autoridades dicen que garantizan nuestra seguridad, pero no les hace nada a esos malhechores que han deshecho decenas de vidas”.
La señora Joaquina Cantor indicó que tras esos hechos fue a la cabecera municipal de Zitlala a pedir la intervención del Ejército: “para que resguardara nuestra salida con los niños y los protegieran, pero me mandaron a la comandancia municipal para pedir que dieran la orden del Ayuntamiento y no nos atendieron”.
Señaló que por eso decidieron salir de su comunidad la noche del 5 de noviembre y viajaron caminando hasta la cabecera de Copalillo, donde llegaron tres días después de caminar por el monte, “no tenemos trabajo, los niños no tienen educación, le pedimos asistencia a las autoridades, que nos den alimentos a granel como maíz, frijol, aceite azúcar, sal; también trabajo porque no vamos a regresar a Tlaltempanapa”.
Víctor Ojeda indicó que esas amenazas ya las habían informado con anterioridad a las autoridades de Zitlala y no intervinieron, “decidimos escapar para estar vivos, para no morir en manos de esos delincuentes”.
El 17 de enero pasado el subsecretario de Gobierno, Martín Maldonado del Moral, les llevó a Copalillo una minuta firmada por el alcalde de Zitlala, Rogelio Ramos Tecorral; el comisario, Magdaleno Amatitlán y el comisariado ejidal, Ernestino Hernández Trinidad.
La gravedad de esa minuta es que las firmas de los comisarios son falsificadas, inclusive Hernández Trinidad fue asesinado hace meses y aparece su supuesta firma con la que, también presuntamente, se comprometen a garantizar la integridad de esas 18 familias si regresan a Tlaltempanapa.
Esa respuesta dio al funcionario del gobierno del estado, quien se comprometió a que la semana que acaba de concluir acudiría el secretario de Gobierno, Florencia Salazar Adame, lo que ocurrió.
El funcionario escuchó sus argumentos de porqué rechazan está propuesta de regresar a su comunidad, “queremos que nos reubiquen de manera definitiva porque regresar a Tlaltempanapa es regresar a que nos maten”, añadió Víctor Ojeda. (www.agenciairza.com)