Sergio Edgar Baños Rubio fue presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en su estado natal, Hidalgo, en el periodo 2014-2017.
En la elección antepasada, hace tres años, contendió por una diputación local y perdió; sin embargo, eso no fue motivo para que colgara los brazos, por el contrario, no dejó de trabajar, siguió en contacto con la gente, con el pueblo, apoyando desde su trinchera, como lo venía haciendo desde hace mucho tiempo.
En las recientes elecciones de hace unos días en aquel estado volvió a competir, ahora por la presidencia municipal de Pachuca de Soto, en donde, ahora sí, obtuvo un triunfo contundente y es hoy el flamante alcalde electo.
Más allá de partidos políticos, nadie puede negar que la Coparmex, piedra angular del sector productivo en México, ha sido semillero de cuadros importantes que han mostrado su valía cuando tienen oportunidad de estar en el servicio público.
El caso más visible en Guerrero es el del ex presidente municipal de Acapulco, Zeferino Torreblanca Galindo, para muchos el mejor que ha tenido este puerto, y que fue también presidente de la Coparmex, de la que también fue presidenta Ana María Castilleja Mendieta, alcaldesa suplente un periodo antes de Zeferino.
De la camada de Sergio Baños es el acapulqueño Joaquín Badillo Escamilla, pues ambos presidieron Coparmex en sus respectivos estados en el mismo periodo, y con quien comparte el mismo tesón, ese espíritu de lucha, de no rendirse, de seguir insistiendo.
Jacko Badillo perdió en 2015 en su primer intento por ser presidente municipal; lo volvió a intentar en el 2018 y fue de los damnificados por el fenómeno lópezobradorista, sin embargo, jamás se ha dado por vencido, como tampoco ha dejado de tener contacto con la gente, con el pueblo, con sus paisanos, a quienes desde hace varios años ha venido apoyando y lo sigue haciendo, con recursos propios, en ese auténtico afán de servir, de hacer el bien.
Sin duda, en el 2021 lo volverá a intentar, más experimentado, mejor preparado, ya con su doctorado en ciencia política y administración pública, como ningún otro de los aspirantes a la alcaldía lo tiene.
Que a nadie sorprenda que así como en Pachuca de Soto con Sergio Baños, en Acapulco Coparmex coloque en la presidencia municipal a otro de sus hijos predilectos, Joaquín “Jacko” Badillo Escamilla.