Chilpancingo, Gro, 17 de Noviembre de 2017.- Como cada año, desde 1990, el 17 de Noviembre se conmemora el Día Mundial del Niño Prematuro, al cual así se le considera cuando el bebé nace antes de los 8 meses (37 semanas de gestación) y por ello, los servicios de salud realizan esfuerzos destinados a disminuir esta situación.
Para ello, es importante que las mujeres acudan a consulta tan pronto sepan que están embarazadas, así como tomar ácido fólico antes y durante el embarazo para disminuir el riesgo de tener alguna malformación en el bebé.
Deben estar atentas a cualquier dato de alarma como hinchazón de pies, manos y cara, dolor de cabeza o zumbido en el oído, visión borrosa, salida de líquido o sangre por la vagina. Si existe alguno de estos signos de alerta, en necesario acudir inmediatamente a la unidad de salud más cercana.
También, es necesaria la realización de exámenes de orina para detectar oportunamente infecciones y tomar el tratamiento adecuado para prevenir un parto prematuro.
Es importante saber que la leche materna disminuye el riesgo de infecciones respiratorias y gastrointestinales en los recién nacidos prematuros, así como el contacto piel con piel con el bebé le ayuda a regular la temperatura de su cuerpo y su respiración. Es de vital importancia la revisión de los ojos de los niños prematuros después de salir del hospital para prevenir pérdida de la visión.
Las principales causas de mortalidad neonatal son asfixia y trauma al nacimiento, malformaciones congénitas del corazón, bajo peso al nacer y prematurez, entre otras, por lo que se recuerda que la estimulación temprana ayuda al bebé a mejorar sus movimientos y sentidos.
De acuerdo con estadísticas de la situación en Guerrero, en 2016 se registraron 41 mil 888 nacidos vivos, en tanto que de niños prematuros sumaron ese año 2 mil 224, y se presentaron 282 defunciones, en tanto que la tasa estatal en ese mismo año fue de 3.89, en comparación con la de 2015, que fue de 6.5, en tanto que la nacional es de 6.9.