*Ácaros, pólenes, hongos, ser alérgico a animales, como perros y gatos, algunos de los causantes
Acapulco, Gro. 05 de Diciembre del 2017. – La tos es un mecanismo de defensa que permite la salida de secreciones, sin embargo, cuando perdura más de tres semanas puede considerarse como un problema respiratorio grave que debe ser atendido con prontitud, indicó el departamento de Epidemiología de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 9 del IMSS en Guerrero.
La tos es uno de los principales mecanismos de defensa que tienen las vías respiratorias frente a partículas extrañas o nocivas, por lo que inicialmente no representa ningún riesgo, aunque si debe ser tratado a fin de evitar complicaciones.
La médica epidemióloga Iris Yolisma Borja Quiñonez, explicó que existe muchos agentes que pueden desarrollar la tos, como son los llamados neumoalergenos, es decir, ácaros, pólenes, hongos, ser alérgico a animales, como perros y gatos, humo del tabaco, polvo, contaminantes atmosféricos (por ejemplo, el ozono o el monóxido de carbono) o laborales (vapores, gases, humos), por mencionar algunos.
“La tos crónica es cuando ya hay una duración de tres semanas y las causas puede ser el tabaquismo, la exposición de humo de leña o carbón, antecedentes con pacientes con tuberculosis o VIH”, comentó.
Algunos síntomas que genera esta enfermedad común explicaron la epidemióloga, son pérdida de peso, fiebres prolongadas, escalofríos, sangrados por la boca e inclusive trastornos alimenticios.
Indicó que el paciente, al acudir a la Unidad de su adscripción, debe realizarse estudios de radiografía o la basiloscopia (análisis de flemas) para identificar el motivo de la enfermedad y no se agudice, pues indicó que es contagiosa.
Comentó que sin importar el periodo del año puede ocurrir la enfermedad, sin embargo, es persistente en otoño e invierno, debido a los cambios de temperatura, por lo que es necesario que existan medidas básicas de prevención como son utilizar ropa adecuada, además de las acciones permanentes de lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño y al toser o estornudar cubrirse con el antebrazo y desechar los pañuelos de papel evitando reutilizarlos.