Con el objetivo de promover la salud en la mujer embarazada y del producto, la Delegación Guerrero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhorta a las mujeres a consumir ácido fólico, vitamina que ayuda a evitar defectos del tubo neural (cerebro y médula espinal) cuando se toma antes y durante las primeras semanas del embarazo.
La falta de ácido fólico es la principal causa del desarrollo de la espina bífida, enfermedad congénita discapacitante o crea defectos del tubo neural que constituye un problema en la médula espinal o las membranas que la recubren.
La doctora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 9 del IMSS en Acapulco, Viridiana Morales Larumbe, explicó que la espina bífida se refiere a que la columna vertebral del feto no se cierra completamente durante el primer mes de embarazo.
Suele haber daño neurológico que causa por lo menos un poco de parálisis en las piernas. Muchas personas con espina bífida necesitarán dispositivos de ayuda como aparatos ortopédicos, muletas o sillas de ruedas. Pueden tener dificultades de aprendizaje, problemas urinarios e intestinales o hidrocefalia – acumulación de líquidos en el cerebro-.
Mencionó que el 98 por ciento de los casos de espina bífida se debe a un déficit de folatos (ácido fólico) en la madre en los momentos previos o inmediatamente posteriores a producirse el embarazo. Otro factor de riesgo son los embarazos de madres adolescentes o de mujeres de más de 35 años, comentó la especialista.
La prevención de los defectos del tubo neural es muy fácil en los embarazos planeados. Reiteró la importancia de que las mujeres en edad reproductiva y con deseos de concebir, tomen un suplemento de ácido fólico diariamente y sobre todo desde tres a seis meses antes de producirse el embarazo y durante los tres primeros meses del mismo, ya que es el momento en que el tubo neural se forma.