Chilpancingo Gro; a 27 de junio del 2019.- La alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, no descartó que elementos de su Policía Municipal “sigan con las mañas (delictivas)”, y en cuanto a los actos “irresponsables” de sus antecesores, advirtió: “yo si quiero que se castiguen conductas ilícitas”.
Román Ocampo acudió este jueves la clausura de estudiantes de bachillerato de la Universidad Americana de Acapulco, campus Chilpancingo, que se realizó en el auditorio José Joaquín de Herrera de Palacio de Gobierno, en donde fue entrevistada por periodistas.
Dijo que la depuración de la Policía Preventiva “es permanente” y que desde el 31 de septiembre -cuando entró en funciones- ha separado entre 400 y 500 elementos porque no aprobaron los exámenes de control de confianza.
“Las personas que meren liquidación, la tendrán, pero los policías que no pasan los exámenes de control de confianza no tienen derecho a nada. La gente que no ha sido certificada o que no pasa los controles de confianza, la normatividad dice que no tiene ningún recurso a su favor”, aseguró.
Precisó que entre mil 200 y mil 400 policías municipales están activos y recordó que antes de rendir protesta como presidenta municipal, la corporación fue desarmada porque operaba como “brazo armado de los carteles en Acapulco”.
“En este momento la Policía está cumpliendo con su función, con su labor, con su trabajo, aunque luego dice el dicho que perro que come huevo, aunque le quemen el hocico -risas-; habrá gente que siga con las mañas, pero los que detectamos los sacamos. Hay algunos (elementos) que están ante la Comisión de Honor y Justicia”, aseguró.
No obstante, resaltó que antes de la Guardia Nacional, la cual inicia funciones este domingo, su gobierno se ha coordinado con las secretarías de Marina, de la Defensa Nacional, Policía Federal, Policía Estatal, de las fiscalías General de la República y del Estado, “eso nos ha dado buenos resultados”.
Me dejaron deudas multimillonarias
“yo si quiero que se castiguen conductas ilícitas”, soltó Adela Román en relación a las irregularidades financieras que le heredaron sus antecesores, principalmente el perredista Evodio Velázquez Aguirre.
Informó que a través de la Contraloría Interna inició varios procesos legales porque “se me hace injusto que alguien administre dinero público y lo haga de manera tan irresponsable. Acapulco no merece eso, siendo los padres del turismo en México, siendo un centro turístico que tiene todo para ofertar. Tenemos agua suficiente, pero la infraestructura está deplorable; de 11 distribuidores de agua, solo servían dos cuando llegamos (al cargo)”.
Recordó que días de haber asumido el cargo, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) le suspendió el suministro de energía y no fue posible seguir bombeando el agua a la ciudad, debido al adeudo de 510 millones de pesos que dejó su antecesor.
“Me dejaron deudas multimillonarias. He pagado muchísimas deudas que surgieron por la irresponsabilidad de quienes gobernaron”, soltó y precisó que no solo de Evodio Velázquez, sino también, incluso, del actual senador del PRI, Manuel Añorve Baños.
“Me heredaron una deuda con una financiera. Cuando llego, estaba una sentencia firme para ejecutarse de 112 millones de pesos. A los trabajadores les descontaron y (las autoridades) nunca le pagaron a la empresa. Estaban más de 4 mil trabajadores en buró de crédito y boletinados en todo el país. Pagamos el adeudo”, recordó.
En ese sentido comentó que ha “tocado las puertas necesarias” porque, “una, yo sí quiero que se castiguen conductas ilícitas; otra, estoy haciendo todo lo que este en mis manos para que en Acapulco se tenga un mínimo de bienestar”. (www.agenciairza.com)