Ciudad de México. 02 de Abril del 2017. – Después de seis meses, el América sigue sin perder en el Estadio Azteca. Siete triunfos y un empate, entre juegos de Liga y Copa, registran las Águilas bajo el mando del técnico Ricardo Antonio La Volpe. Contra el Monterrey, el que volvió a darle la llave para cerrar el triunfo fue Oribe Peralta (63′), encontrándose un balón en el área que no dudó en mandar a las redes.
Un gol que puso más cerca al conjunto azulcrema de zona de calificación, tras haber llegado a 17 puntos. Aunque sigue sumando lesiones: a las bajas de Carlos Darwin Quintero, Miguel Samudio, Renato Ibarra y Paul Aguilar, se agregó anoche la del paraguayo Cecilio Domínguez, quien volvió a resentirse del hombro izquierdo y salió de cambio. Una ausencia que terminó notándose en el desarrollo del partido, pues ni Silvio Romero ni Oribe en su lugar, mostraron el mismo desequilibrio.
Por el contrario, los Rayados tuvieron algunas oportunidades: la más clara por medio de Dorlan Pabón, con un disparo de larga distancia que mandó Marchesín a tiro de esquina.
Sin profundidad, el América sacó fuerzas de sus individualidades, siendo Arroyo y Diego Lainez sus hombres de mayor peligro. Pero entonces salió a relucir la capacidad de Hugo González, el exportero de las Águilas, cuya regreso al Azteca quedó marcado por varias intervenciones de gran dificultad.
Si bien los Rayados fueron insistentes al contragolpe, Chará, Pabón y Rogelio Funes Mori se perdieron entre Bruno Valdéz y José Daniel Guerrero, elegidos como defensas centrales a falta de Goltz y Aguilar. Cuando aparecían los primeros silbidos, Lainez levanto el ánimo del público con un túnel en el área, que, sin embargo, no encontró rematador.
Bajo ese contexto, y sin jugadas colectivas que dieran resultado, Osmar Mares disparó desde la izquierda y encontró, con cierta fortuna, a Oribe Peralta, quien sólo empujó el esférico para el 1-0. El Cepillo sumó su quinto tanto en lo que va del torneo.
A partir de entonces, las Águilas midieron los riesgos. Manejaron el balón, cerraron las líneas y evitaron que cualquier detalle les complicara quedarse con los tres puntos. El Monterrey, con todo y eso, siguió buscando, con desbordes por las bandas y centros hacia Funes Mori y Pabón, aunque sin éxito.
Hacia el final, hubo aplausos para Oribe, Arroyo y Lainez, los tres jugadores que más participación tuvieron en el transcurso del juego por parte de los locales. En cuanto a los demás, siguen quedando dudas. El América se ha puesto más cerca de alcanzar su objetivo, no obstante, la lista de lesiones crece conforme se acercan las últimas jornadas.
*Información tomada de Adrenalina