Debe respetarse la vida humana desde la concepción, reitera el obispo Rangel

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¨Misa al iniciarse la Semana Santa

Chilpancingo Gro; a 14 de abril del 2019.- El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilpa, Salvador Rangel Mendoza, encabezó una procesión este Domingo de Ramos con el que se inicia la Semana Santa, y confió en que así como Cristo, Guerrero puede resucitar en el amor a la vida dejando atrás la tristeza y el dolor que hay en muchos hogares que han sido víctimas de la tragedia.

Con la presencia de unos 900 feligreses, la marcha religiosa partió a las 07:30 de la mañana del parque “Unidos por Guerrero” y llegó a la Plaza Cívica “Primer Congreso de Anáhuac”, en donde el prelado ofició una misa.

En estas fechas en las que los guerrerenses conmemoran la pasión, la muerte y la resurrección de Cristo, el obispo llamó a la lucha y defensa de la vida, “porque yo repito, una criatura en el vientre de su madre no es parte de ella, es una criatura distinta, independiente y con derechos”.

“La salvación de Dios, el poder santificador y liberador de la muerte y resurrección de Jesús se vuelve a hacer presente en medio de nosotros, y hoy Guerrero, nuestra querida ciudad de Chilpancingo, muestran su rostro de fe, muestran su alma cristiana participando con fe y esperanza en estos misterios que nos dieron vida y nos dieron resurrección”.

El jerarca católico consideró que el drama de la Cruz y la Resurrección “retrata muy bien a Guerrero; tenemos tantos signos de muerte, de destrucción, en muchos hogares hay luto, hay lagrimas…”.

Durante el sermón de la misa reveló que a últimas fechas ha recibido la petición para apoyar en la búsqueda de cinco personas que han sido desaparecidas, “por eso yo les digo que hay tristeza, hay dolor en muchos hogares pero hay una esperanza, Cristo resucitó y así como yo no pierdo la esperanza de que encontremos a estas personas desaparecidas, también que el pueblo recobre la fe en sí mismo, la confianza en sí mismo y podamos caminar en un México, un Guerrero resucitado donde amemos la vida, donde respetemos la vida desde el momento de la concepción hasta la muerte natural”.

Rangel Mendoza también hizo referencia a la propuesta del senador Manuel Añorve Baños, a quien agradeció la iniciativa que se planteó en el Senado de la República en el que pide que de manera Constitucional se incluya el valor de la vida, el respeto de la vida desde la concepción hasta la muerte natural.

En este sentido, el obispo invitó a los católicos a que juntos emprendan esta lucha con la que logren derribar ese muro de muerte, de odio, de desprecio a la vida, “la vida es el derecho por excelencia que tiene el ser humano”.

Después de la homilía de este domingo, el obispo bendijo las tradicionales palmas, los ramos, y deseó que esta Semana Santa sea vivida con fe, con devoción, con recogimiento y, sobre todo, que no demos cabida al odio, la muerte y la desaparición. (www.agenciairza.com)