Ayutla de los Libres, Gro. 20 de Junio del 2016 (IRZA). – Maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) se pronunciaron en contra del gobierno y lo llamaron “opresor” por los hechos violentos en el estado de Oaxaca, donde perdieron la vida seis de sus compañeros, e invitaron a la ciudadanía a unirse en contra de las reformas estructurales.
Una comisión de 20 maestros tomó el kiosco que se encuentra enfrente del parque central, y por medio de un sonido repudiaron las acciones en contra de la Sección 22 de Oaxaca, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Señalaron que en la ley no está permitido negar la asistencia médica a ningún mexicano, haciendo referencia a que a los compañeros heridos en el desalojo de Juchitán y Nochixtlán, Oaxaca, les impidieron que personal de la Cruz Roja Mexicana los atendiera de las heridas.
El maestro Roberto Guerrero Arrieta dijo que “una vez más hacemos un llamado al magisterio en general para que se sume a la lucha verdadera, que abran los ojos aquellos agachados; ojalá no sean despedidos y por eso hacemos un llamado consiente de seguir en la lucha, porque afecta a los intereses no sólo de nosotros, sino de todo el pueblo”.
También el profesor Abel López Garibo refirió: “vemos con mucha indignación en el estado de Oaxaca, cómo la policía federal y estatal disparan contra la ciudadanía y contra los manifestantes del magisterio por repudiar esta reforma, y que dieron su vida; en este país quieren imponer una educación que no es; la evaluación quieren generalizarla, cuando no debe de ser así”.
Señaló que también el pueblo está evaluando a ese deshonesto gobierno de Oaxaca que encabeza Gabino Cué Monteagudo, a quien acusan de masacrar a sus pueblos. “Dónde está ese estado de derecho del que tanto hablan, pues nosotros tenemos el derecho de exigir justicia, caiga quien caiga, así sea el Gobierno Federal que tenga que pagar con cárcel”, sostuvo.
Después los maestros dijeron que se reunirán para que se formen las comisiones que viajarán a la Ciudad de México en apoyo al magisterio disidente de la CNTE, sin que se afecten las clases de los alumnos, como se acordó con los padres de familia.