San Miguel Totolapan, Gro. 13 de Diciembre del 2016 (IRZA). – Pobladores de los municipios de San Miguel Totolapan y Ajuchitlán del Progreso que se levantaron en armas el lunes, tras el secuestro de un ingeniero del poblado, exigieron que sea el gobernador Héctor Astudillo Flores el que los atienda en audiencia. Esa fue su postura con la que finalizaron una reunión de dos horas que sostuvieron al mediodía de este martes con una comisión conformada por funcionarios de Gobierno del Estado, la Fiscalía General y de la Comisión de Derechos Humanos en la entidad.
Poco antes de las 12:00 horas de este martes, el subsecretario de Asuntos Políticos del Gobierno del Estado, Martín Maldonado del Moral; el vicefiscal Alejandro Santos González y la primera visitadora general de la Comisión Estatal de Defensa de los Derechos Humanos, Violeta Parra Reynada, arribaron a San Miguel Totolapan para dialogar con los pobladores que se levantaron en armas, en un intento de que dejaran en libertad a veinte trabajadores del Ayuntamiento de aquí que tomaron como rehenes, además de la regidora María del Carmen Barrera Navarro, del PRI, y María Félix de Almonte, madre de Raybel Jacobo de Almonte, alias “El Tequilero”, presunto jefe de la banda criminal identificada con su apodo, señalado como autor del secuestro del ingeniero Isauro de Paz Duque, desaparecido el domingo por la tarde.
“El propósito del equipo negociador es buscar que no lastimen a la persona reportada como desaparecida, ni tampoco a la madre del jefe de la banda de los Tequileros que al parecer se encuentra en manos del grupo de autodefensa”, señaló un comunicado del Grupo de Coordinación Guerrero (GCG).
Los pobladores armados se negaron a liberar a los rehenes hasta que sea el gobernador Héctor Astudillo el que acuda a San Miguel Totolapan a dialogar con ellos, por lo que los funcionarios les dijeron que les llamarían, y se retiraron.
A los rehenes los mantienen en la Comandancia de la Policía Municipal, ubicada en la calle Constitución de esta cabecera municipal de la región de la Tierra Caliente, en un intento de negociar la liberación de éstos por el ingeniero y demás personas secuestradas por la banda de “El Tequilero”.
En una breve entrevista al término de la entrega de apoyos del programa Prospera en Casa Guerrero, en Chilpancingo, el gobernador Héctor Astudillo Flores dio a conocer que habían sido liberadas cinco personas que estaban retenidas por la autodefensa de San Miguel Totolapan.
“El gobierno está interviniendo y lo que se ha tratado de hacer es detener a quien está ocasionando estos secuestros”, dijo en referencia al líder del grupo delictivo denominado “Los Tequileros”.
El Grupo de Coordinación Guerrero informó que en reunión con el gobernador acordaron la implementación de un operativo de búsqueda y localización del ingeniero secuestrado, conformado por 220 elementos, de los cuales 120 son efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional, 60 policías federales y 40 estatales.
Los pobladores de San Miguel Totolapan que se levantaron en armas el lunes, apoyados por ciudadanos del vecino municipio de Ajuchitlán del Progreso, hasta la tarde de este martes mantenían retenida a la madre del líder de “El Tequilero”, además de una regidora y trabajadores del Ayuntamiento de ese lugar, a quienes hicieron sus rehenes y con los que intentan negociar que sea liberado un ingeniero que fue secuestrado el domingo por esa banda criminal.
El lunes, la esposa del ingeniero secuestrado emplazó a “El Tequilero” a entregar sano y salvo a su marido y de la misma forma le entregarán a su mamá, pero si no le respeta la vida, advirtió que le ocurriría lo mismo a su madre.
Para las 15:00 horas de este martes se dejó de percibir presencia de elementos de la Policía Federal y del Ejército Mexicano, que antes y durante la reunión habían estado recorriendo las calles y montando filtros de vigilancia en la entrada a esta cabecera municipal. De nueva cuenta quedaron abandonados.
La población se encontraba alterada, alerta, porque les informaron que un grupo de hombres armados se dirigía a rescatar a los rehenes de la Comandancia de la Policía Municipal, por lo que se instalaron en guardia con sus armas en la calle principal.
La sicosis creció aún más esta tarde de martes porque familiares de los rehenes, que son de San Miguel Totolapan y a los que consideran halcones (informantes) de “El Tequilero”, se acercaron a unos cien metros de la Comandancia para exigir que los liberaran, además de que tomaban fotografías y amenazaban con que el grupo delictivo acudiría a “granadear” el pueblo y se llevaría uno a uno a los vecinos que se levantaron en armas.
En grupos pequeños, los vecinos armados también hacen recorridos por el pueblo y entran a casas que supuestamente utilizan de guarida los integrantes de la banda de “El Tequilero”, donde se pudo observar botellas de cerveza y colchones, además de vehículos abandonados.
En el lugar se informó que esta tarde de martes “El Tequilero” hizo contacto por teléfono con la esposa del ingeniero secuestrado, a la que le aseguró que ya tenía conocimiento de lo que habían pedido a los funcionarios del Gobierno del Estado.
Cerca de la Comisaría instalaron una mesa larga donde comen juntos y se mantienen unidos, por temor a ser desaparecidos.
Hasta pasadas las 16:00 horas no había registro de ninguna confrontación a balazos dentro de San Miguel Totolapan.
Los vecinos de este pueblo denunciaron que el 30 por ciento de los pobladores ha sido desplazado por la violencia, donde incluso les han quemado sus casas para que dejen este lugar y, en otros casos, aseguraron que en los últimos meses tienen un registro de al menos 100 personas desaparecidas o secuestradas, a las que les exigen por su libertad entre 100 mil y 300 mil pesos.
Para la celebración de la virgen de Guadalupe, la iglesia de San Miguel Arcángel lució vacía la noche del domingo y todo el lunes.
Las gasolineras están abandonadas, no hay transporte, los comercios están cerrados por temor a que se susciten actos violentos o secuestren a los propietarios, además de que las escuelas suspendieron clases y los campesinos han ido abandonando sus tierras.
Los pobladores dijeron que se sienten en una cárcel, porque ahora no pueden entrar ni salir de este lugar, por lo que solicitaron la atención personal del gobernador para que se establezca una verdadera estrategia de seguridad y sean liberados el ingeniero y demás personas desaparecidas, y que la presencia policiaca y militar sea permanente en este municipio.
Advierten los habitantes de San Miguel Totolapan que su movimiento es “por la paz” de su región y que no lo detendrán hasta lograrla.