Por: José Molina de la Cruz
Chilpancingo, Gro. 08 de Enero del 2018. – Marco Antonio Marco Leyva Mena irrumpió en el Palacio Municipal de Chilpancingo, y se asumió nuevamente como presidente municipal de Chilpancingo, aunque de acuerdo con Jesús Tejeda Vargas, alcalde interino, señaló que no ha sido notificado por el Congreso sobre esta decisión.
Alrededor de las 11:00 de la mañana, el presidente municipal con Licencia, Marco Antonio Leyva Mena, en conferencia de prensa, anunció su decisión de retomar el cargo, argumentando que estaba en todo su derecho, y que ya había informado al Congreso del Estado.
Expuso que se ha enfrentado a su propio partido, donde le han cerrado las puertas para acceder a otros cargos de elección popular, pero se había mantenido dentro por la militancia.
“Como presidente municipal he recibido un ataque como a ningún otro presidente municipal, parecía ser que, en los esquemas del cálculo político de los precandidatos de mi partido, estaba hacer a un lado a Marco Leyva, para que pudiera tener la posibilidad de reelección”.
Consideró que los ataques a su persona no trajeron más que división al interior de su partido, ahí tienen que ahora hay varios aspirantes a la alcaldía de Chilpancingo, “la estrategia fue fallida y equivocada”.
Marco Leyva Mena, informó que este día notificó al Congreso del Estado, su incorporación a sus funciones como presidente municipal de Chilpancingo, con las atribuciones legales que le otorga la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
“He decidido regresar por los infundios permanentes de mi adversario político, por querer utilizar la manipulación y la calumnia como herramienta para conseguir sus fines, sumado a la instrumentación de adelantar tiempos de auditorías y aparatos coercitivos para dañar y desaparecer del mapa político a quien consideran enemigos políticos”, dijo.
Se dijo dispuesto a enfrentar al gobernador, Héctor Astudillo Flores, desde donde se han originado los ataques, razón por la cual ha dejado su seguridad personal y la de su familia en manos del Gobierno Federal.
“Eh sido amenazado desde la llegada a esta administración, y eh aguantado el fue amigo, no le eh solicitado al gobierno del estado, porque cuando le solicité guardo un desesperado silencio, no les quiero representar una carga, quiero mirar de frente a mi familia”.
Dicho esto, Marco Leyva se dirigió al Palacio Municipal acompañado por un grupo de ex colaboradores, ingreso a la oficina que ocupaba en ese momento, Jesús Tejeda Vargas, y se asumió como presidente municipal; posteriormente saludo al alcalde interino y se introdujo a una oficina privada.
Fue recibido por los trabajadores, algunos aplaudían, otros le daban la bienvenida, mientras el resto se mantuvo a la expectativa de lo que ocurría.
Durante la toma de la presidencia, no estuvo presente el cabildo, y tampoco hubo oposición por parte de algún funcionario municipal, incluso le abrieron todas las puertas del Palacio Municipal.
Consultado sobre este hecho, Jesús Tejeda Vargas, manifestó que no había sido notificado hasta ese momento por el Congreso del Estado de esta decisión, por lo que seguía siendo el presidente municipal.
Calificó la acción de Leyva Mena como un arrebato político y una violación a la ley, a los reglamentos y un reto al Congreso del Estado, quien es el organismo facultado para decidir el rumbo de la presidencia municipal, y solo tomará en cuenta lo que ahí se determine.
Jesús Tejeda Vargas, permaneció en la oficina principal, mientras que Leyva Mena se quedó varias horas en la oficina privada y hasta esta tarde, no había información oficial por parte del Congreso del Estado respecto a este asunto.