*Los puso en manos de criminales que los ejecutaron
*Pero la investigación del caso continúa
Chilpancingo, Gro. 07 de Enero del 2018. – Un efectivo de la Policía Municipal de Chilpancingo identificado como Remigio “N”, fue detenido y presentado ante un juez de primera instancia, quien le dictó prisión preventiva en tanto se determina su situación legal el próximo viernes 12 de enero, como presunto responsable de haber entregado a dos jóvenes a un grupo del crimen organizado, y quienes lamentablemente aparecieron ejecutados la semana pasada en el paraje Tierras Prietas, al norte de esta ciudad.
Esos serían los primeros resultados de la intervención de militares, policías estatales y federales el pasado jueves en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública de Chilpancingo (SSPCH).
La Fiscalía General del Estado (FGE) inició una carpeta de investigación, luego de que se desatara un clamor social de inconformidad tras haber aparecido asesinados los jóvenes Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Eduardo Catalán Cabrera.
Los jóvenes estaban desaparecidos desde la madrugada del sábado 31 de diciembre y se pudo conocer que ambos habían sido detenidos por policías municipales en las instalaciones de la Feria, en la colonia Los Ángeles de esta ciudad, y posteriormente se sospechaba que habían sido entregados por los mismos policías a miembros del crimen organizado, quienes los habrían asesinado.
El jueves 4 de enero por la mañana, el alcalde de aquí, Jesús Tejeda Vargas, confirmó que los dos jóvenes fueron detenidos e ingresados a la Delegación de Barandilla en el transcurso de la noche del 30 de enero y los dejaron en libertad luego que “alguien” pagó sus respectivas multas y después de eso ya no se supo más de los dos conocidos jóvenes capitalinos, hasta que aparecieron muertos en Tierras Prietas.
Por eso, en el transcurso del jueves policías estatales y federales respaldados por militares decidieron tomar el control de la policía capitalina y retuvieron y desarmaron a mandos y policías preventivos municipales, incluido Esteban Espinoza Montoya, secretario de Seguridad Pública en el municipio.
Como parte del procedimiento se inició una revisión a sus armas, radios de banda civil y teléfonos celulares, y se investigó quiénes estuvieron de servicio el día de los hechos.
En la revisión de la bitácora cotidiana de la SSPCH se estableció con claridad que en la noche del 30 de diciembre se recibió una denuncia de una riña en las instalaciones de la Feria y se enviaron a patrullas y policías para atender esa denuncia.
Se sabe con claridad qué patrullas y qué elementos intervinieron en ese incidente y se sabe que en ese lugar fueron detenidos Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Eduardo Catalán Cabrera, pero también otra persona de nombre Milton, quien se identificó como “amigo” de los dos jóvenes, mismo que pagó las multas para que quedaran libres “sus amigos”.
Jorge Arturo y Marco Eduardo fueron escoltados de las instalaciones de Barandilla por el propio policía Remigio, quien de acuerdo con testimonios y videos de circuito cerrado que se encuentran en la zona, entregó a los dos jóvenes a esta persona identificada como Milton, quien junto con otro hombre joven que portaba un rifle de asalto se los llevaron por la fuerza en un automóvil Nissan tipo Tsuru blanco.
La noche del sábado, la FGE presentó ante el juzgado tercero penal de esta capital al policía Remigio en calidad de detenido y como probable responsable de la desaparición de los dos jóvenes y de ser cómplice de quienes los habrían asesinado.
En la audiencia que se desahogó en ese juzgado, el policía dio a conocer que no contaba con un abogado particular, por lo cual se le asignó un defensor de oficio, además de que se reservó su derecho a declarar.
En la misma diligencia, el juez dio a conocer que el próximo viernes 12 de enero habrá de determinar la situación jurídica del policía preventivo, si se le deja en libertad o le dictan auto de formal prisión, para que inicie un juicio en su contra por esos hechos que le imputa la FGE.
El hecho de que hasta el momento sólo sea un policía el vinculado a proceso por el caso de los dos jóvenes asesinados no indica que no se esté investigando la participación en estos hechos o la colusión de otros elementos o mandos con algún grupo del crimen organizado, se dijo.